Site preloader
Óptica en Fuengirola – Centro Óptico Balbuena

Desprendimiento de retina: síntomas y tratamiento

Tener una retina sin problemas es básico para disfrutar de una visión clara. La retina es un tejido sensible a la luz que se encarga de recoger la información visual del exterior y enviarla a través del nervio óptico en forma de impulsos eléctricos para que el cerebro lo interprete como imágenes.

La retina está unida al humor vítreo, una especie de gel que rellena nuestro ojo, situado exactamente entre la retina y el cristalino. Compuesto, en su gran mayoría por agua, el humor vítreo también contiene colágeno, ácido hialurónico y proteínas. ¿Pero cuál es exactamente su función?

Ocupa la mayor parte del globo ocular, lo que le permite mantener su forma, y ejercer un papel fundamentalmente protector. Para ello, el humor debe tener unas características que permitan a la luz atravesarla sin dificultad, y, además, ser suficientemente consistente para ejercer su principal misión, proteger la retina.

¿Qué es entonces un desprendimiento de retina?

En ocasiones, la cantidad de humor vítreo puede reducirse, despegándose de la retina y produciendo desgarros en ella. Estos desgarros pueden producir que la retina se desprenda de la parte posterior del ojo, produciendo lo que conocemos como desprendimiento de la retina.

Este es un problema muy grave que en la mayoría de los casos necesita ser operado para solucionarse. Cuando se produce un desprendimiento de la retina, la visión se vuelve borrosa, y si el problema no se trata con urgencia, puede llegar a causar ceguera.

¿Cuáles son los síntomas del desprendimiento de la retina?

El síntoma más común del desprendimiento de la retina son las manchas en la visión o moscas flotantes. Constituyen uno de los primeros síntomas de este problema ocular, las cuales aparecen con más incidencia cuando miramos hacia la luz, o a un fondo blanco.

Aunque es cierto que este síntoma es bastante común, si las manchas se acentúan o se multiplican impidiendo la visión nítida, es necesario acudir rápidamente a un experto.

La aparición repentina de centelleos también puede ser síntoma de un inicio de desprendimiento. Las sombras en partes de nuestro campo de visión, cortinas grises o cualquier otra disminución repentina de la claridad visual pueden ser síntomas de este problema ocular.

Un experto de la visión, como los de Centro Óptico Balbuena, puede ayudar en el diagnóstico precoz del desprendimiento de retina y remitir con urgencia a un especialista. En algunos casos, también es posible dar con el problema en un examen ocular rutinario, por eso es tan importante acudir con frecuencia a tu óptica de confianza.

Tratamiento para el desprendimiento de la retina

Tratamiento para los desgarros

Los desgarros de la retina tienen que tratarse mediante un procedimiento que fije la retina a la parte posterior del ojo de la cual se ha desprendido. Estos procedimientos causan pocas molestias, y podemos diferenciar dos procedimientos.

  • Cirugía con láser o fotocoagulación. En este caso el especialista utiliza un láser para realizar quemaduras alrededor de la zona del desgarro. La cicatriz que se crea al quemar esta zona funciona como un adhesivo que fija la retina al tejido.
  • Tratamiento de congelación o criopexia. El método es muy similar al de la cirugía láser salvo que el experto utiliza una sonda que aplica frío para congelar la retina y así fijarla.

Tratamiento para el desprendimiento

Si el desgarro se ha convertido en un desprendimiento de la retina, el tratamiento incluirá un reposicionamiento de la retina que debe realizarse en un quirófano. Hay tres tipos de cirugías.

  • El cerclaje o gancho escleral. El procedimiento consiste en utilizar un gancho alrededor de los ojos que haga de contrapeso y neutralizar la fuerza de tracción de la rutina. El gancho hace fuerza para que la retina se coloque en la posición correcta.
  • La retinopexia neumática. En este caso se inyecta una burbuja de gas en el espacio que ocupa el vítreo en el ojo para que empuje la retina hacia su lugar correcto. La burbuja desaparece en unos días de manera natural. Este procedimiento se combina junto a la cirugía con láser o el tratamiento de congelación. En algunos casos puede realizarse en el consultorio del oftalmólogo.
  • Vitrectomía. Esta cirugía extrae el vítreo y lo sustituye por una esfera de gas, en la que la final desaparece del mismo modo que en la retinopexia, o una esfera de líquido, que tendrá que ser extraída posteriormente en otro procedimiento.

La mayoría de estos procedimientos finalizan con éxito. La visión puede tardar en recuperarse varios meses y en algunos casos puede que nunca vuelva a recuperarse en su totalidad.

Para tener mejores resultados y evitar problemas más graves no olvides acudir a tu revisión anual en Centro Óptico Balbuena. La prevención es la mejor cura. Pide tu cita en nuestra web pinchando aquí, llámanos al 952582501 o visítanos en cualquiera de nuestros centros de Fuengirola.

Leave a comment